martes, 27 de noviembre de 2012

Negatividad



Llevaba varios días pensando en escribir esto aquí. Ya que, me sirve de un modo de desahogo, y puede que haya alguien por ahí, que se sienta identificada conmigo.

Siempre intento transmitir positividad. Porque la persona que entre aquí, precisamente es para sentirse apoyada, buscar consuelo, o llenarse de fuerza para afrontar otro día nuevo en esta dura lucha contra la obesidad. Pero de vez en cuando (y quien haya leído mis anteriores entradas), necesito expresar también mis turbios pensamientos que contaminan mis metas, para de algún modo, sacarlos a la luz y que ya no orbiten más alrededor de mi cerebro.

Lo he explicado en alguna ocasión; mi vida ha sido un constante vaivén de dietas, de no dietas, de dietas, de no dietas, de dietas, de no dietas... desde que tengo uso de razón. Ha habido alguna ocasión que sí, que he logrado perder bastante peso (sobretodo en mi temprana adolescencia), pero siempre acababa recuperándolo porque en ese momento, no tenía otro hobbie/gusto más importante que comer.
Ha habido centenares de veces, que me he mirado al espejo y he dicho "Ya está bien, Bradshaw, sabes que no eres feliz, así que pon remedio a ello", me he llenado de todo el coraje y fuerza de voluntad que había en el mundo y le he echado un par de narices para empezar, y he logrado mantener una buena racha por X tiempo que siempre acababa rompiendo porque o; 1: no perdía el peso deseado a la rapidez deseada, o 2; una celebración de por medio con mucha comida rica me hizo tambalear mis ideas y volver a centrarme en la comida.

Y últimamente, un pensamiento en concreto me invade constantemente, cuando intento concienciarme para seguir el camino hacia el único éxito que daría un vuelco en mi vida increíblemente positivo; adelgazar. ¿Qué pensamiento es? Complejos. Todas y cada una de nosotras tenemos muchos (millares) más de complejos que solo el tema del "peso", bien es sabido. Pero al menos en mi caso, sé que si alcanzara mi peso deseado, el 80% de complejos sería eliminado por completo, pero aún así, mi "diablo" interno, se empeña en intentar convencerme de que no merece la pena, porque el 20% restante seguiría ahí... que si alguna estría, que si esto, que si lo otro... Así que, "¿para qué adelgazar? puede que estés predestinada a estar así toda tu vida, ¿no ves que has terminado fracasando una y otra vez?". Es cierto que esto último también me hace pensar de forma bastante negativa. El haber fracasado tanto tiempo. El no haber sido capaz de empezar y de terminar, de ser tan poco constante y de permitirme el lujo de rendirme tan gratuitamente. Así que, obviamente la idea de que pueda llegar a ser algo totalmente "fuera de mi alcance", existe.

Pero no os preocupéis, ya os digo que esto es un simple modo de desahogarme de toda la negatividad. Yo continúo mi camino, intentando ser más fuerte cada día, y aprender de mis errores, ¡como la mayoría de vosotras!

Por cierto, muchas gracias por compartir vuestras historias conmigo, y con el resto del mundo. A mí también me anima ver cómo os armáis de fuerza y valor y lucháis contra este duro (pero no imposible) camino de malos hábitos...















No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bradshaw

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...